1.- FRAGMENTACIÓN DEL MEDITERRÁNEO:
Con la caída del Imperio Romano de Occidente se inicia la Edad Media, que se divide en:
- Alta Edad Media: siglos V-X.
- Plena Edad Media: siglos XI-XIII.
- Baja Edad Media: siglos XIV-XV.
Entre los siglos V y VII los territorios mediterráneos sufren una división política, religiosa y cultural.
- El antiguo Imperio Romano de Occidente se fragmentó en reinos independientes donde se mezclaron la cultura romana y germana, imponiéndose la religión católica.
∙ Los reinos germanos: los germanos (bárbaros) depusieron al emperador y crearon diferentes reinos:
1. En Britania: anglos y sajones.
2. En Italia: ostrogodos.
3. En la Galia: francos, que crearon el Imperio Carolingio, cuyo emperador, Carlomagno, aspiró a dominar el continente europeo. Dividió su imperio en condados y marcas.
4. En Hispania: visigodos; eran aliados de los romanos y vinieron a expulsar a los invasores bárbaros (suevos, vándalos y alanos), pero tras ser expulsados por los francos de las tierras concedidas en la Galia, se asentaron en la península y crearon un reino con capital en Toledo, cuyo rey era elegido por los principales personajes. En la primera mitad del siglo VII, las luchas entre reyes y nobles facilitó la invasión musulmana del 711 y el fin de este reino.
- El Imperio Romano de Oriente se mantuvo con el nombre de Imperio Bizantino. En 1453 su capital, Constantinopla, fue ocupada por los turcos, lo que supuso el fin del imperio. Las razones de su prolongación en el tiempo fueron un poder político fuerte, una red de funcionarios especializados, leyes únicas y un ejército poderoso. Se alejó de la cultura romana y se acercó a la griega, imponiéndose en religión el cristianismo ortodoxo, lo cual supuso un cisma (ruptura) con la Iglesia Católica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario